El Tándem

DIGITALIZACIÓN
“Busca el equilibrio de tu marca para conseguir el éxito con tu colaborador”.

El Tándem

Ya lo decía Aristóteles en “Ética a Nicómaco”: la Virtud se encuentra en el “justo término medio”, ya que los extremos nos generan vicios.

Y esto es lo necesario para poder dirigir un tándem, un equilibrio. Si no hay compenetración entre la persona que va delante y la de atrás posiblemente no consigas llegar donde quieres.

El TándemEsta idea hay que interiorizarla a la hora de posicionar tu marca en un territorio como los Esports, y ese equilibrio es el que ha de tener tu estrategia y tu activación. La estrategia ha de ser el paraguas que represente una idea clara de lo que eres o quieres ser en el nuevo sector en el que te aventuras; y la activación ha de ser la materialización de esa idea y conexión con las personas a las que quieres llegar. Si tienes una gran estrategia pero una pobre activación, ocurrirá, como en el tándem, que tendrás una buena guía pero no empuje, por lo que no llegarás a tu destino. Si tienes una estrategia no definida pero una buena activación, irás el primero al principio, pero llegará un momento en el que acabes perdido sin saber dónde te encuentras.

El TándemEn el caso de Mahou San Miguel con los Esports queremos conseguir ese equilibrio y nos preguntamos cómo, qué y por qué. En esa búsqueda de respuestas entendemos que no todas las marcas han de estar en un sector, aún siendo el mismo producto, ya que cada una de ellas tiene una personalidad propia. Una marca que personalice a la naturaleza no puede representar un sector que se base en el desarrollo tecnológico, por ejemplo, ya que es contradictorio.

Una vez llegado a este punto, toca trazar una ruta, un plan, un sentido temporal, en definitiva, primero hay que caminar antes de correr. Es por ello que cuando entras a formar parte de un nuevo territorio, lo mejor es presentar tu marca como si no fuese conocida y trabajar estrechamente con el colaborador, ir de la mano, ser un acompañante, para que te conozcan en el sector elegido. A partir de ahí, toca trabajar tu voz, pero eso ya es otra historia…